Omeprazol, ¿un protector de estómago?

El omeprazol es conocido popularmente como un protector del estómago porque bloquea la secreción de ácido clorhídrico por parte de este órgano, siendo muy útil en aquellas patologías que cursen con hiperacidez o pueda generarse.

El sistema  ATC asigna a cada sustancia química con actividad farmacológica un código que representa el órgano sobre el que actúa, sus indicaciones terapéuticas y la estructura química del mismo https://www.vademecum.es/atc-us

El código A02BC01 está asignado al omeprazol y representa su:

• Grupo Anatómico: Sistema digestivo y metabolismo
• Grupo Terapéutico: Agentes para el tratamiento de alteraciones causadas por ácidos
• Grupo Farmacológico: Agentes contra la úlcera péptica y el reflujo gastroesofágico (RGE/GORD)
• Subgrupo químico: Inhibidores de la bomba de protones

Se prescribe además de su grupo farmacológico, como preventivo en personas que tomen otros medicamentos sin que manifiesten problemas gástricos y en otras ocasiones, se consume como preventivo y paliativo frente a comidas más copiosas o bebidas más indigestas; sin embargo,

 

«El uso indiscriminado y mantenido a lo largo del tiempo del omeprazol o cualquier otro fármaco inhibidor de la bomba de protones (IBP) es un factor desencadenante de otras patologías»

 

El uso crónico del omeprazol como protector

El estómago contiene millones de células parietales responsables su secreción ácida, estas células responden a mediadores endógenos que las activan y a mediadores endógenos que frenan esta producción, y a su vez estos mediadores responden a otros muchos estímulos guardando entre sí un EQUILIBRIO que permite el correcto funcionamiento del proceso digestivo.https://www.scielo.sa.cr/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1409-00152010000200007

La pérdida de este equilibrio puede desencadenar una producción excesiva de ácido (hiperclorhidria) o un déficit del mismo (hipoclorhidria) y ninguna de estas situaciones es beneficiosa para la persona.

Los síntomas de hiperclorhidria son fáciles de diagnosticar porque mayoritariamente cursan con ardor, sensación de quemazón, dolor estomacal, reflujo ácido… Sin embargo, los síntomas de hipoclorhidria son más silenciosos y su manifestación clínica suele ser a través de otras patologías.

 

 La hipoclorhidria como agente pro inflamatorio

La acidez del jugo gástrico es necesaria para:

• eliminar las bacterias y otros agentes patógenos que ingerimos con los alimentos, y
• activar a la enzima pepsina que se encarga de degradar a las proteínas para poder absorberse a nivel intestinal

 

El uso continuado de este grupo de fármacos alcaliniza este órgano, el pH se mantiene ácido pero no en sus niveles óptimos por lo que:

• disminuye el poder bactericida
• no hay una activación completa de pepsinógeno a pepsina que es la forma activa

Es decir, por un lado aumenta el riesgo de colonización de microorganismos patógenos en el mismo estómago u otros órganos y por otro lado, la degradación no completa de las proteínas de la alimentación por parte de la pepsina provoca una mayor producción de sales biliares y de enzimas pancreáticas para compensar el déficit de la actividad de la pepsina.

A su vez, la degradación incompleta de las proteínas genera un déficit en la biodisponibilidad de sus aminoácidos tan necesarios en la síntesis de neurotransmisores, por eso se ha asociado el uso crónico del omeprazol con el desarrollo de patologías neurodegenerativas.

Un exceso de proteínas mal digeridas favorece el desarrollo de bacterias proteolíticas por lo que se desencadenan fenómenos de disbiosis intestinal que la persona puede manifestar con gases, distensión abdominal tras las comidas, estreñimiento.. y en casos más graves patologías inflamatorias intestinales.

El uso crónico del omeprazol y sus análogos producen un déficit micronutricional de vitaminas como los folatos, cianocobalamina y vitamina C; y un déficit en los niveles de oligoelementos como el calcio, magnesio, hierro y zinc.

Por lo que una persona que presente anemias, osteoporosis u otra patología osteo-articular, algún tipo de enfermedad autoinmune e incluso algún proceso oncológico se debe preguntar si está tomando de manera continuada este grupo de medicamentos.

 

 

Abordaje integrativo en las patologías del estómago

El abordaje integrativo siempre es multidisciplinar

• ¿Alimentación incorrecta?
• ¿Actividad de microorganismos patógenos ?
• ¿Ruptura de biorritmos?
• ¿Presencia de otros medicamentos que dañan la mucosa gástrica?
• ¿Estrés?

 

Existen alternativas naturales al omeprazol aunque siempre es aconsejable recurrir a un especialista ya que en el enfoque integrativo no se trata la enfermedad sino a la persona que la padece y todas sus circunstancias que le han llevado a dicha situación.